¿Conoces el masaje holístico? Es un tipo de masaje que trabaja sobre todos los aspectos que nos conforman como personas. Busca restablecer el equilibrio entre la mente, el cuerpo y las emociones, reconectándonos con la experiencia de sentir un bienestar integral.
Para la mayoría de las personas, el estilo de vida actual va ligado a las prisas y el ansia por pensar, hacer y tener las cosas lo más rápido posible, sin apenas tiempo para relajarnos y dejar vagar nuestra mente.
Las consecuencias las conocemos todos: estrés, ansiedad, agotamiento, dolores musculares y molestias a las que no prestamos atención, aunque son pequeñas alarmas que nos indican que no estamos bien, nos falta el equilibrio necesario para volver a levantarnos con energía y actuar y pensar con plena consciencia de nuestras emociones.
Para ayudarnos a recuperar el equilibrio perdido, el terapeuta utiliza distintas técnicas para desbloquear tanto nuestra parte física como psicológica y espiritual.
Índice
¿Qué es el masaje holístico?
El masaje holístico trabaja sobre la persona como un todo, tal y como indica su nombre, donde el bienestar de cada parte, física, mental y emocional, es imprescindible para tomar consciencia de nuestro yo de forma completa.
Es un masaje personalizado en el que el terapeuta utiliza diversos tipos de terapias según las necesidades de cada persona. Cuanta más amplia sea la formación del profesional, mayor será el abanico de herramientas del que dispondrá para lograr la finalidad de este masaje.
Algunas de las terapias que se emplean para devolvernos el equilibrio natural son:
- Quiromasaje
- Osteopatía
- Reflexología
- Musicoterapia
- Aromaterapia
- Fitoterapia
- Terapia nutricional
- Técnicas de relajación
El masaje holístico se distingue por no trabajar solo para aliviar los síntomas físicos que se manifiestan, sino que considera todo el resto de factores que puedan haber provocado el desequilibrio.
Es un masaje largo, suele durar aproximadamente una hora, en el que el terapeuta combina manipulaciones manuales y movimientos con momentos de relajación, todo ello en un ambiente tenue, armónico y calmado, al que contribuyen otros elementos como aceites esenciales, música, velas, pindas, piedras calientes, …
¿Qué beneficios tiene el masaje holístico?
Sin duda, uno de los principales beneficios de este masaje es la relajación. Tras la sesión, la persona que ha recibido el masaje siente el cuerpo y la mente profundamente calmados, ligeros y renovados. Gracias a esta liberación de los bloqueos físicos y mentales, se incrementa el nivel de energía con el que afrontamos el día a día. Pero esto no es todo, te contamos otros beneficios que aporta esta práctica:
- Bajan ostensiblemente los niveles de estrés y ansiedad y se relaja el sistema nervioso.
- Mejora nuestra postura. Un estado de estrés mantenido causa daños en los órganos, en el sistema nervioso e incide en las posturas que adoptamos. Sin ser conscientes de ello, nos encogemos y encorvamos contracturando nuestros músculos.
- Disminuyen los valores de la tensión arterial.
- La respiración es más profunda.
- Mejora la capacidad de concentración y de claridad mental. El masaje favorece el riego sanguíneo y llega un mayor aporte de oxígeno al cerebro.
- Se destensa y flexibiliza la musculatura.
- Mejora la elasticidad de la piel.
- Se fortalece el sistema inmunológico.
- Se eliminan toxinas.
El masaje holístico nos devuelve la conciencia sobre nuestro cuerpo, mente y emociones. Un sistema nervioso relajado y un buen estado de ánimo se refleja en nuestra expresión y nuestra postura. Crecemos interior y exteriormente al destensarnos físicamente y cargarnos de energía y vitalidad.
¿Cómo se hace el masaje holístico?
El masaje holístico combina las manipulaciones propias de los diferentes tipos de masaje con técnicas destinadas a procurar un completo alivio de la tensión y un bienestar emocional para conseguir un equilibrio lineal del cuerpo, la mente y las emociones.
En el masaje holístico se distinguen tres fases:
- En la primera fase, las manos del terapeuta masajean todo el cuerpo, captando las zonas más tensionadas y las contracturas. Puede emplearse diversos tipos de masaje (tailandés, californiano, …) y el aceite más idóneo al estado emocional de quien lo recibe. Según las necesidades de cada persona, el masajista decide las maniobras y los procedimientos más adecuados.
- En la segunda fase el masajista se concentra en estimular los puntos reflejos y los canales por los que fluye la energía. Se logra un mayor estado de relajación y bienestar al desbloquear estos puntos y tratar de forma refleja los diferentes sistemas del cuerpo, al tiempo que se regulan las emociones. El terapeuta puede emplear la digitopuntura de la Medicina Tradicional China, la reflexología, el masaje Tuina o el masaje ayurvédico.
- La tercera y última fase se centra en trabajar la conexión entre el cuerpo y la mente a través de masajes en la cabeza y la columna vertebral, activando los siete círculos o centros principales de energía, chakras, que simbolizan la unión entre la mente y el cuerpo, es decir, la conciencia y la materia.
Según la medicina ayurvédica, los chakras están situados a lo largo de la columna, comenzando en su base y ascendiendo hacia la coronilla. Absorben la energía y desencadenan una respuesta fisiológica acorde a las frecuencias vibratorias de cada individuo. Cada chakra se corresponde con un aspecto físico, psicológico, emocional y espiritual del ser y su desequilibrio, por un bloqueo o mal funcionamiento, da lugar a trastornos que afectan al cuerpo, la mente y las emociones. Trabajando estos puntos de energía se restablece el equilibrio y el bienestar. Se trabajan sin ejercer apenas fuerza, solo apoyando las manos y equilibrando la energía que sienten para favorecer un estado de completa relajación.
¿Qué esperar del masaje holístico?
Tras una sesión de masaje holístico se consigue una óptima sensación de bienestar físico, mental y emocional. La sensación de ligereza que se adquiere al trabajar las contracturas y la rigidez causadas por el estrés y la ansiedad, se une a una gran tranquilidad de ánimo y una mayor capacidad de atención hacia lo que nos rodea, sin mantener la mente ofuscada.
Físicamente, disminuyen los dolores óseos, articulares y musculares. También mejora el aspecto de la piel y la expresión, gracias a la activación del riego sanguíneo y, por tanto, el mayor aporte de oxígeno y nutrientes más la relajación de los rasgos debido a la disminución de la tensión y el estrés. Psicológica y emocionalmente, el equilibrio de la energía armoniza cuerpo y mente, favoreciendo el tratamiento de la ansiedad y el insomnio.
El masaje holístico es uno de los tipos de masaje más completos con grandes beneficios para la persona que lo recibe y que permite a los terapeutas profesionales sacar el mejor provecho de todas las terapias en las que se ha formado.
“El todo es más que la suma de sus partes” (Aristóteles)