Los aceites esenciales para hacer masajes juegan un papel muy importante a la hora poner en práctica el conjunto de técnicas de manipulación de los tejidos que trabajan los quiromasajistas.
A nivel comercial, conseguimos diferentes aceites esenciales para masajes que, dependiendo de la necesidad de cada cliente, podemos seleccionar el que mayores beneficios proporcionen.
La incorporación de los aceites esenciales para masajes, además de actuar como tranquilizante, por su aroma, pueden llegar a absorberse por la piel, alcanzar la circulación sistémica y así el sistema nervioso, causando en la persona bienestar no solo físico sino también emocional.
Es importante resaltar que la esencia de los aceites para masajes actúa específicamente en el hipotálamo. Este es una región del cerebro que se encarga de la liberación de las hormonas para regular el estado anímico de las personas. Controla también otras funciones importantes como la temperatura corporal, el hambre y la sed.
El equipo perfecto para lograr que un quiromasajista logre sus objetivos es acompañar los masajes con un aceite esencial adecuado para brindar a los clientes mejores sesiones.
Índice
Beneficios del uso de aceites esenciales en quiromasaje
El uso de aceites esenciales en quiromasaje amplifica los efectos terapéuticos del masaje, por lo que ofrece beneficios físicos y emocionales significativos. Veamos los más destacados.
Reducción del estrés y la ansiedad
El quiromasaje con aceites esenciales es una herramienta poderosa para combatir el estrés y la ansiedad. Los aceites esenciales, como la lavanda, son especialmente conocidos por sus propiedades calmantes.
Durante una sesión de quiromasaje, el aroma de la lavanda actúa sobre el sistema nervioso, ayudando a disminuir los niveles de cortisol, la hormona del estrés. Este efecto induce una sensación de calma y bienestar, lo que convierte a la lavanda en una elección ideal para quienes buscan relajarse profundamente y reducir la tensión acumulada.
Alivio del dolor muscular
El alivio del dolor muscular es otro de los grandes beneficios de combinar aceites esenciales con quiromasaje. Aceites como el eucalipto y la manzanilla son efectivos para tratar dolores musculares y articulares, gracias a sus propiedades antiinflamatorias y analgésicas.
Estos aceites no solo relajan los músculos durante el masaje, sino que también aceleran la recuperación de lesiones al reducir la inflamación. El eucalipto, por ejemplo, es ideal para masajes deportivos, donde es necesario tratar y prevenir contracturas o tensiones musculares.
Mejora de la circulación
La mejora de la circulación sanguínea es uno de los efectos directos del quiromasaje, y este se potencia con el uso de aceites esenciales como el romero. El romero es conocido por su capacidad para estimular la circulación y ayudar en la desintoxicación del cuerpo.
Cuando se aplica en masajes de drenaje linfático, este aceite facilita la eliminación de toxinas y mejora la oxigenación de los tejidos, lo que es especialmente beneficioso para personas con problemas circulatorios o retención de líquidos.
Hidratación y cuidado de la piel
Más allá de los efectos físicos y emocionales, los aceites esenciales también ofrecen beneficios estéticos, como la hidratación y el cuidado de la piel. Aceites como el aloe vera son conocidos por sus propiedades hidratantes y regeneradoras.
En un quiromasaje, el uso de estos aceites no solo calma la piel irritada o sensible, sino que también promueve su regeneración, manteniéndola suave y saludable. Esta combinación hace que el quiromasaje con aloe vera sea ideal para personas que necesitan un cuidado extra para su piel, especialmente después de una exposición prolongada al sol o en climas secos.
¿Qué aceites esenciales se utilizan en el quiromasaje?
Desde el punto de vista de la recuperación física, todos los aceites esenciales para masajes tienen diferentes resultados. Se pueden conseguir aceites que estimulan o energizan, relajan, revitalizan e incluso que ayudan a sanar ciertas afecciones.
Aceite esencial de canela
Sirve para recuperar la elastina y el colágeno de la piel. El aceite esencial de canela es una buena opción para prevenir el envejecimiento prematuro, disminuyendo la aparición de las líneas de expresión. Su propiedad antiespasmódica ayuda a aliviar dolores musculares, así como los causados por la artritis.
Aceite esencial de eucalipto
Es uno de los aceites esenciales con más propiedades medicinales, entre las que destacan las antisépticas y antinflamatoria. Es usado para heridas leves, favoreciendo la cicatrización. Alivia dolores musculares, como artrosis y reumatismo. Además, proporciona un aroma agradable y bastante relajante.
Aceite esencial de geranio
Su aroma floral induce a la relajación y baja los niveles de estrés después de un día agotador. Ayuda a mejorar la circulación sistémica. La retención de líquidos disminuye al masajearse con la esencia. Repara, hidrata y nutre la piel.
Aceite esencial de lavanda
Su aroma produce una sensación refrescaste, relajante y antidepresiva. Un masaje con el aceite esencial de lavanda ayuda a conciliar el sueño y, por lo tanto, aumenta los niveles energéticos durante el día.
Su acción en la piel como regeneradora, hidratante, cicatrizante y antisépticas lo hace una elección adecuada para realizar masajes. Ideal para pieles sensibles a la hora de realizar masajes musculares.
Aceite esencial de manzanilla
La manzanilla es bastante popular por todos sus beneficios, y estos se conservan en su aceite. Un masaje que contenga en su aceite la manzanilla es el indicado para relajar tensiones en aquella personas nerviosas e irritables.
En la piel también se usa por sus propiedades antinflamatorias, cicatrizante, para pieles irritadas, secas y sensibles.
Aceite esencial de menta
Este aceite esencial, sólo con su aroma, provoca una sensación de energía, estimulando los sentidos. Un masaje con aceite esencial de menta ayuda a disminuir el cansancio mental, los dolores de cabeza y calma el ritmo cardiaco.
Aceite esencial de sándalo
Su árbol es considerado en la India como sagrado. Cuando usamos su aceite esencial para hacer masajes tiene la capacidad de mejorar el estado de ánimo, aliviar la ansiedad, depresión y nerviosismos.
Para una piel limpia, humectada y luminosa la esencia de sándalo es ideal. Posee un aroma inigualable y relajante.
Aceite de coco
El aceite de coco suele venir en dos presentaciones: fraccionado y puro. La diferencia primordial es que el primero es mucho más ligero y menos concentrado que el segundo.
Este aceite es de acción rápida, lo que le permite ser absorbido por la piel instantáneamente. Tiene propiedades de hidratación, así que desprenden toda resequedad, mancha o afección cutánea. Es altamente recomendado para pacientes con acné y problemas similares.
Aceite de jojoba
El aceite de jojoba es el más adecuado a la hora de hacer quiromasaje en pieles cuya sensibilidad es elevada. La razón no es otra que su composición. Esta última es respetuosa con el cuerpo porque se asemeja muchísimo al cebo corporal humano.
El aceite de jojoba es por lo tanto muy útil a la hora de combatir el acné. Sin embargo, puede ir mucho más allá, llegando a servir contra el envejecimiento cutáneo. Todo gracias a sus propiedades antibacterianas, que remueven lo que acelera la vejez.
Entre otros aceites terapéuticos para quiromasaje, el de jojoba es tal vez el de absorción más rápida. Incluso más que el de coco. Esta cualidad se debe principalmente a que es muy sedoso, lo cual le hace penetrar en la piel sin esfuerzo.
¿Cómo hacer aceites para masajes?
Una excelente opción y económica es elaborar los aceites esenciales por propia cuenta. Sin embargo, es necesario tener presente que los aceites esenciales son muy concentrados y ocasionan lesiones si se aplican directamente en la piel.
Se debe usar un aceite base o portador que son de derivados vegetales, que también tienen propiedades beneficiosas. Los aceites bases o portadores se pueden conseguir en herbolarios, farmacias y otros comercios relacionados con el área.
Aceite de almendras
Sus propiedades antinflamatoria, emoliente e hidratante, la hacen una esencia de elección para aceites de masajes.
Es usada para tratar afecciones de sequedad, estrías, líneas de expresión, entre otras. Su buena absorción a través de la piel ayuda a disminuir los niveles de estrés y ansiedad.
Aceite de aloe vera
Conocida comúnmente como Sábila, su aceite esencial conserva los beneficios de la planta. Ayuda a mantener la flexibilidad de la piel, así como también su firmeza previniendo con esto la aparición de las líneas de expresión.
Su potencia se debe a la presencia de betacaroteno y las vitaminas C y E. Su propiedad antinflamatoria y su acción antioxidantes, ayuda a mejorar y controlar la buena salud de la piel.
Aceite de germen de trigo
Proporciona un delicado aroma. Su alto contenido en vitamina E lo hace un aceite ideal para tratar problemas de piel. Su propiedad antioxidante y su contenido de ácido grasos mejora significativamente la elasticidad y tono de la piel, ejerciendo un efecto rejuvenecedor. Ayudan a calmar pieles doloridas, fatigadas, inflamadas y resecas.
Después de seleccionado el aceite portador o base, debemos mezclar con tres a cinco gotas del aceite esencial. Se puede usar varios aceites esenciales en la mezcla siempre y cuando no excedamos la cantidad. Recuerda colocar siempre la mezcla que contiene los aceites esenciales primero en las manos y frótalas. No apliques directamente la mezcla con aceites esenciales sobre la persona.
Bajo esta perspectiva, cada sesión de masaje es única, donde quedan expuesto los sentidos. Por eso importante, tener un ambiente que despierte en las personas una sensación tranquilidad, relax, agrado y confianza.
Cada cliente debe sentirse libre a la hora de manifestar cada una de sus dolencias para que así, como quiromasajistas podamos seleccionar la técnica y el aceite esencial más adecuado a sus necesidades.