El masaje es una técnica antiquísima utilizada en todas las culturas del mundo. El simple hecho de llevar la mano hacia una zona golpeada o dolorida es un acto innato e instintivo que busca aliviar el dolor y sanar el malestar. El gesto de una madre que frota suavemente en círculos el vientre de su hijo para que no le duela o la suaves caricias que lleva a cabo para que se duerma son formas de masaje. Podría decirse que el masaje es uno de los primeros recursos terapéuticos que ha usado el hombre.
Durante miles de años, las diversas civilizaciones han ido desarrollando técnicas y manipulaciones que han dado lugar a distintas formas de masaje, aunque todas ellas persiguen devolver y mantener el bienestar.
Uno de los masajes más antiguos es el Hanpi Qhaqoy o masaje medicinal andino, una de las Terapias Naturales Ancestrales de la Medicina Andina.
Índice
Fundamentos del Hanpi Qhaqoy
La medicina tradicional de los Andes está intrínsecamente unida a la cosmología de la cultura precolombina. Los pueblos andinos, desde Colombia hasta Argentina, comparten una visión del ser humano como un microcosmos similar al macrocosmos que constituye el universo. Los hombres y las mujeres, los astros celestes, las montañas, los ríos, las piedras, los árboles y todos los seres vivos están formados y comparten los mismos elementos que la Madre Tierra o Pachamama: tierra, fuego, aire y agua.
Todo se comunica e interactúa entre sí con una comunicación que se considera sagrada y está basada en la reciprocidad, el respeto y el cuidado de toda la comunidad integrando en ésta todos los elementos de la naturaleza.
Desde este concepto holístico en el más amplio sentido de su significado, la persona se concibe sana y completa mediante la unión armónica de mente, emociones, espíritu, cuerpo y el entorno natural.
El masaje se concibe como un tránsito por la geografía humana, que consideran sagrada, formada a semejanza de la Pachamama, y se trazan analogías: los huesos son rocas, la carne es tierra, el vello es pastizal, las venas y arterias son ríos y la piel es una capa física entre el mundo interior y el mundo exterior.
Modalidades y manipulaciones del masaje medicinal andino
A través de las manipulaciones y las maniobras se desbloquean las energías para que fluyan libremente por el organismo aliviando la sequía de la “tierra” y los “ríos” y restableciendo el equilibrio.
El masajista que practica el masaje medicinal andino reconoce y activa unos puntos determinados, denominados paqarina. Son puntos de conexión que comunican la superficie con el interior físico (órganos internos) y psicológico y que son regulados e influidos con unas técnicas específicas.
Existen diferentes modalidades de masaje Hanpi Qhaqoy en función del objetivo del mismo. Según las técnicas y el modo de aplicarlas, el masaje será energético, relajante o terapéutico.
El masaje medicinal andino tiene tres enfoques:
- Qhaqoy Tullu: trabaja para recuperar el bienestar óseo
- Qhaqoy Uku: trabaja sobre los músculos y nervios
- Qhaqoy Poqpo: equilibra la energía del organismo
Las manipulaciones que se utilizan en el masaje Hanpi Qhaqoy están ligadas a los elementos que forman la madre tierra:
- Allpa. Son las manipulaciones ligadas a la tierra. Son descontracturantes, firmes y profundas.
- Yaku. Las manipulaciones del agua. Relajan el cuerpo y la mente. Son movimientos fluidos y suaves.
- Nina. Estas manipulaciones están ligadas al fuego. Son estimulantes, activas y energéticas.
- Wayra. Las sutiles manipulaciones del aire limpian los campos energéticos para que las energías fluyan libremente.
Los masajistas del Hanpi Qhaqoy emplean sus manos y antebrazos y también utilizan cañas, partes de vegetales o animales, huevos, hierbas medicinales y piedras frías o calientes.
Los masajes Qhaqoy reúnen todas las experiencias y sabiduría ancestrales de las culturas y tradiciones andinas. El tacto de las manos del masajista a través de la piel, la barrera entre los mundos interior y exterior, permite armonizar la energía del organismo con la del entorno, poniendo en práctica el ayni, el principio de reciprocidad, que dice que así como se da, se recibe. Cuando la energía de una persona está bloqueada o es demasiado pesada, lo que ellos denominan Hucha, el masaje andino emplea las manipulaciones necesarias que la hagan fluir y soltar el exceso (dar) para equilibrarse con las energías sutiles o sami (recibir).
El masaje medicinal andino es una terapia energética que busca guardar el complejo equilibrio del flujo vital o kausay.
Eres tierra, enraízate, construye, da. Eres agua, llora, limpia, fluye. Eres aire, se calmo, enfocado, decidido. Eres fuego, quema, ilumina, enciende.”
(Frase de la cultura quechua)