El masaje terapéutico se ha utilizado durante siglos para mejorar la salud en general, reducir el estrés y aliviar la tensión muscular.
La investigación muestra que el masaje prenatal puede ayudar a reducir la ansiedad, disminuir los síntomas de depresión, aliviar los dolores musculares y articulares, y mejorar los resultados del trabajo de parto y la salud del recién nacido. En este artículo analizamos la seguridad del quiromasaje prenatal, sus beneficios y las cuestiones que hay que tener en cuenta.
Índice
Quiromasaje prenatal
El quiromasaje prenatal o durante el embarazo puede ayudar a la mujer embarazada a sobrellevar los cambios en su cuerpo que ocurren durante esta etapa. Puede ser especialmente útil para aliviar las molestias en un momento en el que no puede usar algunos medicamentos u otras opciones médicas.
El quiromasaje prenatal se utiliza para reducir el estrés, reducir la hinchazón en brazos y piernas y aliviar el dolor muscular y articular en mujeres embarazadas. Aunque el quiromasaje en el embarazo puede involucrar muchas técnicas de masaje diferentes, normalmente se emplean técnicas de masaje suave.
El embarazo puede ejercer mucha presión sobre la espalda, los hombros, el cuello y los músculos abdominales. El quiromasaje prenatal está diseñado para aliviar algunos de los dolores y molestias que son comunes durante el embarazo.
Es importante hacer una distinción entre el quiromasaje prenatal terapéutico y el masaje perineal. Este último se refiere a la práctica de estirar manualmente los tejidos que rodean el canal de parto para ayudar a reducir el riesgo de episiotomía o trauma asociado con el parto.
Beneficios del quiromasaje prenatal
Los principales beneficios de quiromasaje prenatal son los siguientes:
- Regulación hormonal. Los estudios realizados en los últimos años han demostrado que los niveles hormonales asociados con la relajación y el estrés se alteran significativamente cuando se introduce la terapia de masaje en el cuidado prenatal de las mujeres. Esto conduce a la regulación del estado de ánimo y mejora la salud cardiovascular. En las mujeres que recibieron masajes quincenales durante solo cinco semanas, se redujeron hormonas como la norepinefrina y el cortisol (hormonas asociadas al estrés), y se incrementaron los niveles de dopamina y serotonina (los niveles bajos de estas hormonas se asocian con la depresión).
- Reducción de la hinchazón. El edema, o hinchazón de las articulaciones durante el embarazo, a menudo es causado por la reducción de la circulación y el aumento de la presión sobre los principales vasos sanguíneos debido al peso del útero. El masaje ayuda a estimular los tejidos blandos para reducir la acumulación de líquidos en las articulaciones inflamadas. Esto también mejora la eliminación de desechos de tejido transportados por el sistema linfático del cuerpo.
- Mejora del dolor nervioso. Muchas mujeres experimentan dolor del nervio ciático al final del embarazo cuando el útero descansa sobre los músculos del piso pélvico y la espalda baja. La presión del útero extiende la tensión a los músculos de la parte superior e inferior de la pierna, lo que hace que se hinchen y ejerzan presión sobre los nervios cercanos. El masaje trata los nervios inflamados al ayudar a liberar la tensión en los músculos cercanos. Muchas mujeres han experimentado una reducción significativa del dolor del nervio ciático durante el embarazo a través del masaje.
Otros beneficios potenciales del masaje prenatal incluyen:
- Reducción del dolor de espalda
- Reducción del dolor articular
- Mejora de la circulación
- Reducción del edema
- Reducción de la tensión muscular y dolores de cabeza
- Reducción del estrés y la ansiedad
- Mejora de la oxigenación de tejidos blandos y músculos
- Dormir mejor
Precauciones para el quiromasaje prenatal
Al igual que con cualquier enfoque terapéutico para el bienestar del embarazo, las mujeres deben hablar sobre los masajes con su ginecólogo. La mejor manera de abordar los riesgos del masaje prenatal es estar informado y trabajar junto con profesionales capacitados.
Muchos profesionales consideran que la mejor posición para una mujer embarazada durante el masaje es acostada de lado. Las mesas que proporcionan un orificio en el que puede caber el útero pueden no ser confiables y, aun así, pueden aplicar presión sobre el abdomen o permitir que el abdomen cuelgue, causando un estiramiento incómodo de los ligamentos uterinos.