Eunice Ingham está considerada como la propulsora de la Reflexología podal, gracias a su tarea divulgadora entre el gran público. Sobre todo, destacan los libros Stores the feet can tell y Stories the feet nave told.
Antes de Ingham, el médico William H. Fitzgerald desarrolló la terapia zonal a partir de observaciones. Durante sus intervenciones, notó que muchos pacientes presionaban con fuerza las yemas de los dedos de las manos contra los cantos situados debajo del asiento y esto les permitía soportar mejor el dolor.
Fitzgerald estudió la influencia de esa presión en determinados puntos del cuerpo. Concluyó que el cuerpo puede dividirse en diez zonas longitudinales que parten de los dedos de los pies y la manos y terminan en el cráneo.
Esas zonas recorren órganos, vísceras y otras estructuras, así que manipulando ciertos puntos se puede influir en los órganos que cruza.
Los estudios de Fitzgerald se desarrollaron y aparecieron otros autores que divulgaron la terapia zonal y la reflexoterapia podal. Sin embargo, Fitzgerald no prestó demasiada atención a las áreas reflejas de los pies.
En España, la primera publicación sobre reflexoterapia podal la escribió Frederic Viñas. En ella, el doctor Viñas dio a conocer las posibilidades de esta técnica.
La reflexología podal es uno de los tipos de masaje más populares. Implica aplicar diferentes cantidades de presión a los pies, aunque también se puede aplicar a manos y oídos. En general, se basa en una teoría de que estas partes del cuerpo están conectadas a ciertos órganos y sistemas corporales.
Es una práctica de medicina alternativa basada en un sistema pseudocientífico de zonas y áreas reflejas que del cuerpo en los pies y las manos, con la premisa de que tal trabajo en los pies y las manos produce un cambio físico en las áreas relacionadas de el cuerpo.
La reflexología se basa en la antigua creencia china en el qi o «energía vital». Según esta creencia, el qi fluye a través de cada persona. Cuando una persona se siente estresada, su cuerpo bloquea el qi.
Esto puede causar un desequilibrio en el cuerpo que conduce a la enfermedad. La reflexología tiene como objetivo mantener el qi fluyendo a través del cuerpo, manteniéndolo equilibrado y libre de enfermedades.
Índice
Beneficios potenciales de la reflexología
La reflexología está vinculada a muchos beneficios potenciales, aunque solo unos pocos han sido validados en estudios científicos.
Hasta ahora, hay evidencia limitada de que la reflexología puede ayudar a reducir el estrés y la ansiedad, reducir el dolor, levantar el ánimo y mejorar el bienestar general.
Además, muchas personas han informado que la reflexología les ayudó a estimular su sistema inmunológico, combatir el cáncer, superar los resfriados y las infecciones bacterianas, aclarar problemas sinusales y recuperarse de problemas de espalda.
También hay múltiples testimonios de que puede ayudar a corregir los desequilibrios hormonales, aumentar la fertilidad, mejorar la digestión, aliviar el dolor de artritis y a tratar problemas nerviosos y entumecimiento por medicamentos contra el cáncer.
De hecho, la reflexología puede abordar casi cualquier cosa, desde dolores de cabeza hasta problemas sinusales y problemas estomacales.
Diferencias entre reflexología y masaje de pies
No es lo mismo un tratamiento de reflexología que un masaje en los pies. Un reflexólogo trabajará en áreas para promover una respuesta curativa en los órganos correspondientes.
Por su parte, un terapeuta de masaje que dé un masaje de pies manipulará los músculos y otros tejidos blandos para mejorar la circulación, aliviar el dolor y curar lesiones en el área o para inducir la relajación general.