Puntualmente, el quiromasaje puede provocar daño a los nervios si se realiza de forma incorrecta o si no se tiene en cuenta la situación del sujeto en general; es decir, otros problemas subyacentes que pueda tener. Hablamos sobre ello en este artículo.
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Quiromasaje y daño en los nervios
Aunque son casos extraños y muy puntuales, el riesgo existe. La investigación ha encontrado numerosos casos en los que la terapia de masaje puede causar daño a los nervios. Hay informes de casos en la literatura científica que sugieren que el masaje puede causar daños en el nervio radial, el nervio accesorio espinal, el nervio interóseo posterior y otros.
Aunque muchos de los casos parecen resolverse sin consecuencias a largo plazo, existe la posibilidad de que se produzcan daños neurológicos graves. Cualquiera que considere la posibilidad de recibir un masaje debe ser consciente de este riesgo y consultar con su médico si tiene alguna duda.
No obstante, muchos de los casos que se dan suelen deberse a masajes aplicados por personas no cualificadas. Por lo general, el quiromasaje realizado por quiromasajistas capacitados es una práctica segura. Sin embargo, las personas que tengan una afección médica grave o que estén en tratamiento médico deben comunicárselo, tanto al quiromasajista como al médico que les trata.
¿Qué hay que hacer para evitar daños nerviosos durante un masaje?
El masaje es seguro y efectivo
Los nervios no son muy vulnerables al masaje
- La mayoría de los nervios están bien acolchados por otros tejidos.
- Los nervios sanos no son frágiles y no es más probable que se dañen con una presión moderada que el tejido muscular, los vasos sanguíneos o los tendones.
- Si se ven amenazados por un trauma, por la presión o la tensión, los nervios producen muchas sensaciones de advertencia que detendrán a cualquier persona sensata antes de que se produzca mucho daño.
