La movilización de tejidos blandos asistida por instrumentos o IASTM (por sus siglas en inglés) es un tratamiento efectivo para lesiones de músculos, ligamentos y tendones.
Esta técnica de masaje y liberación miofascial, también conocida como Técnica de Gastron, funciona como un masaje estándar, pero utilizando instrumentos específicos en lugar de las manos. Estos instrumentos permiten un tratamiento más directo de los tejidos blandos implicados en el movimiento.
Índice
Origen de la técnica de Graston
La técnica Graston de movilización de tejidos blandos asistida por instrumentos fue desarrollada en la década de 1990 para deportistas, aunque actualmente se usa en todo tipo de pacientes.
Desde entonces, ha ganado popularidad y lo utilizan quiromasajistas, quiroprácticos y fisioterapeutas para ayudar a tratar a pacientes con restricciones miofasciales que pueden causar dolor y limitar el movimiento.
Se pueden usar diferentes tipos de herramientas para realizar esta técnica. Algunas de estas herramientas están diseñadas específicamente por la empresa Graston®, y muchas otras empresas ofrecen su propia versión de herramientas para raspar y frotar metal o plástico para aplicar la movilización de tejidos blandos asistida por instrumentos.
En cualquier caso, los objetivos son los mismos, independientemente de las herramientas que se usen. Este objetivo es ayudar a liberar los tejidos blandos y las restricciones miofasciales para mejorar la forma en que se mueve.
Cómo funciona la técnica IASTM
Cuando se utiliza una herrramienta IASTM el objetivo es buscar áreas de restricciones musculares y fasciales. Estas áreas se notan abultadas, quebradizas o escarpadas al pasar la herramienta sobre ellas.
Una vez que se encuentran restricciones en la fascia, se usan las herramientas para trabajar la zona, pasando sobre ella de la manera precisa que requiera la situación concreta, raspando y moldeando la zona.
La teoría es que estas acciones sobre los tejidos provocan microtraumatismos en los tejidos afectados, lo que reinicia la respuesta inflamatoria natural del cuerpo.
Esto da lugar a la aparición de una serie de eventos, entre los que se incluye la reabsorción del exceso de tejido de la cicatriz y fibrosis que está causando la restricción. Después, las adherencias del tejido cicatricial se pueden estirar adecuadamente para ayudar a mejorar la movilidad general sin dolor.
Beneficios de la movilización de tejidos blandos asistida por instrumentos
Entre los principales beneficios de la técnica de movilización de tejidos blandos asistida por instrumentos destacan los siguientes:
- Mejora de la movilidad de los tejidos blandos
- Eliminación de restricciones en fascia afectada
- Flexibilidad y movilidad mejoradas
- Alivio del dolor más rápido
- Aumento de la circulación y el flujo de sangre a los tejidos
- Disminución de los espasmos musculares
Quién puede beneficiarse de la Técnica de Graston y quién no
Cualquier persona con dolor, lesiones o afecciones en los tejidos blandos puede beneficiarse de la técnica Graston de movilización de tejidos blandos asistida por instrumentos. Estas personas suelen ser deportistas, trabajadores que cargan mucho peso y personas que realizan movimientos repetitivos muchas veces a lo largo del día.
Entre las muchas condiciones que pueden beneficiarse de esta técnica destacan las siguientes:
- Tejido cicatricial excesivo
- Diferentes formas de tendinitis o tendinopatías (como codo de golfista, codo de tenista, etc.)
- Esguinces de músculos y ligamentos
- Lesiones por correr (como la fascitis plantar y síndrome de la banda iliotibial, entre otros)
Sin embargo, hay algunas condiciones para las que la técnica Graston de movilización de tejidos blandos asistida por instrumentos no es apropiada. Es el caso de las personas que tengan una afección articular degenerativa, como artritis- En este caso, esta técnica no puede ayudar a aliviar el dolor en los tejidos que rodean la articulación, pero no en la articulación misma.
Por otra parte, tampoco pueden beneficiarse de estas técnicas las personas con fractura óseas, alguna forma activa de cáncer, neuropatía diabética o enfermedad arterial periférica.